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13 de noviembre de 2008

Ciudades vivas por la tiza

Un capítulo de la Rayuela de Cortázar (pág. 480) comienza con Pola (la amante de Oliveira) mirando al suelo y medio mundo mirando al suelo. La imágenes descendentes que se presentaban eran, desechables, obras de arte pintadas con tizas, espectáculo que perduraría hasta el siguiente día, para luego trasladarse a otras calles, esto si los jóvenes o viejos artistas reciben unas pocas monedas de los curiosos presentes.

Julian Beever (artista británico callejero), los días miércoles en Film & Arts, presenta un reality show llamado Arte urbano, en el que viaja por distintas ciudades alrededor del mundo para conocer a los mejores artistas (y sus técnicas) callejeros de las localidades visitadas, además de realizar una obra con tiza en tres días que represente, a su parecer, la idiosincrasia del lugar. En noviembre podremos verlo por New York, San Francisco, París y Ciudad de México.


Durante el periodo desde que se terminó de redactar la nueva Constitución hasta el referéndum de aprobación, uno de los gratos sabores que dejó la oposición y algunos activistas que apoyaban el Sí, fue la muestra de imaginación a la hora de hacer campaña. Olvidando a las personas que paseaban un borrego por las aceras o la viudas que se vestían de negro, el haberle vendado los ojos a varias estatuas alrededor de Quito o el pegar afiches parecidos a los de clausura que coloca el SRI a los locales que no cumplen con las disposiciones, pero estos irreverentes con contenidos alusivos a la propiedad privada, simplemente fueron ideas geniales.

En Guayaquil, aparentemente la imaginación únicamente se desata en el salón octubre y en el salón de julio (además de los eventos políticos), con algunas obras que te puede volar la mente. Galerías de arte como DPM (se recomienda el blog de Rodolfo Kronfle: http://riorevuelto.blogspot.com/) también mantienen notables exposiciones.

Sin embargo, el arte en Guayaquil, pareciera necesitar una fuerte dosis de comunismo para que esta salga a las calles y esté dispuesta a expresarse y revelarse ante todo el mundo y no permanecer en remotas islas con pocos visitantes.

En una ciudad donde cansa la monotonía y rigidez de la arquitectura, no vendría nada mal darle algo de vida, y no hay que referirse únicamente a los grafitis, que en la mayoría son asociados con pandillas o "lacras sociales", aunque varias de las más sabias frases que he escuchado o leído están retratadas en paredes alrededor del globo, como las famosas del mayo del 68: “Prohibido prohibir” o “Debajo de los adoquines, la playa”.

Si se comienzan a rayar las paredes del cabildo porteño, varios grupos de urbanidad y ciudanía, seguramente encabezados por Margarita Arosemena, empezarían a marchar y protestar, por según ellos, dañar el ornato de la ciudad, entonces para que todos seamos felices, podrían invitarse a artistas locales y/o extranjeros que trabajen bajo la técnica de Julian Beever, donde sus obras de arte sean perecederas, retratando las costumbres y estilos de vida de los guayaquileños, donde incluso después de un tiempo, por propia decisión de los moradores de los sectores, la imagen podría quedarse permanentemente (en Gran Bretaña, vecinos de barrios han pedido que no se borren ciertos grafitis porque los sienten parte de la comunidad).
El mismo Julian, y se puede verificar mientras vemos su programa, señala que estos dibujos crean un aire de confraternidad entre las personas que se detienen a observarlos y varias ciudades alientan a su exposición. En Guayaquil debería buscarse otras formas de que los ciudadanos disfrutemos de los lugares públicos.

7 de noviembre de 2008

El Kevin Carter que algunos llevamos por dentro

Existen fotografías que dan la vuelta al planeta por su crudeza y atrocidad. Su fama proviene del despertar que provoca en el resto de la humanidad, de que existe una realidad a varios miles de kilómetros de distancia.

Imágenes de la masacre de My Lai en Vietnam despertaron al mundo de lo que realmente sucedía en esa guerra, de igual forma; y para los almanaques de nuestra memoria tenemos escenas de los campos de concentración nazis en la Segunda Guerra Mundial. Solo para nombrar unos pocos ejemplos de los horrores, retratados, que han sido autores y víctimas los seres humanos.


Pero, ¿quiénes son los personajes que inmortalizan estos momentos? No aliento a que los veamos cómo héroes, sino simplemente como testigos presentes, en vivo y en directo, de momentos cruciales que quedarán grabados en la historia y preguntarnos: ¿Cómo afectaron estos hechos en sus vidas?



Kevin Carter nació en Sudáfrica en 1960, en plena época de apartheid. Cuando cumplió los 24 años y a sabiendas de los enormes privilegios que tenía por haber nacido blanco y de las enormes injusticias que esta diferenciación conllevaba, empuñó su cámara fotográfica como arma para luchar contra el racismo de aquel entonces.

Con la liberación de Mandela en 1990 y durante los 4 años siguientes, tiempo en el cuál se iniciaron los procesos de paz que llevarían hacia la democracia sudafricana, a causa de los opositores de este proyecto, se vivió el período más violento en este país. En las periferias de Johannesburgo diariamente se produjeron masacres en las que murieron cerca de 12,000 personas. Ahí, copiando las palabras del fantástico John Carlin (periodista el cual sería mi referente si me dedicara a esa profesión), Carter se presentaba, todos los días por las mañanas, a esos campos de la muerte, como se presentan los oficinistas a su trabajo.

John Carlin estuvo también presente en estos sitios como corresponsal de guerra (razón por la qué tomo de su historia los principales hechos para este post) y vio como el fotógrafo sudafricano, por realizar su trabajo, se exponía a los mayores peligros con tal de obtener una imagen. Kevin trabajaba junto a tres compañeros más, a los cuáles denominaban “el Bang Bang Club”. Dormían poco y consumían drogas de todo tipo para adaptarse de la mejor manera, en ese mundo frenético al que debían asistir durante el tiempo que duró el conflicto.


En marzo de 1993, Carter viaja de vacaciones a Sudán y apenas llega al lugar, ve la escena de una niña, que si no supiéramos que se trata de un ser con alma, podríamos decir que era un famélico saco de carne buscando como sobrevivir, acechada por un buitre. Carter tomó varias fotografías durante veinte minutos esperando que el ave carroñera extienda sus alas para darle más dramatismo a la foto. Que el animal extienda sus alas no fue necesario, porque la imagen dio la vuelta al orbe y le sirvió a Carter para ganar el Pullitzer en 1994.

Para él, el compromiso profesional era realizar la mejor foto posible, porque con esto despertaría la sensibilidad de los que la vieran, pero Carter fue comparado con el buitre por su egoísmo de no haber corrido a auxiliar a la niña, además de la constante pregunta que le realizaban sus conocidos: ¿Ayudaste a la niña?

Esta constante y agobiante persecución, sumada al asesinato de uno de sus compañeros del “Bang Bang club” y al cese de la guerra en Sudáfrica, que lo puso a Carter en una situación de trabajo estable, provocó que el 27 de julio de 1994, en el sitio donde pasó los mejores momentos de su niñez, el fotógrafo sudafricano se quitara la vida.



Esta historia me recuerda a una conversación que tuve a principios de año, con una persona que trabajó en la organización “Médicos sin fronteras”, durante la guerra civil en Angola. Me contó las barbaries que presenció en ese lapso, y como al final se sintió en un estado donde trataba a sus pacientes como objetos a los que no debería prestársele mayor interés, porque no sabía si seguirían vivos el día de mañana, y si embargo, cuando quiso regresar a su hogar junto a su familia, vio que su vida no era la misma y a los dos meses compró un ticket de avión, solo de ida, con destino a África.

No sé si esté dispuesto o mi carácter sea el suficiente para trabajar dentro de una zona de conflicto donde el único aire que se respire es el de la muerte, pero el ejemplo de Kevin Carter, a pesar de todos sus errores como ser humano, me recuerda como algunas personas estamos dispuestas a ir a lugares lejos de nuestro hogar y en situaciones adversas, por cumplir una labor que realmente apasione, y cuando nos preguntan el por qué lo hacemos, no sabemos que responder, solo sentimos que es algo innato.

Fuentes:
La fotografía de la pesadilla, por John Carlin.
http://www.elpais.com/articulo/paginas/fotografia/pesadilla/elppor/20070318elpepspag_10/Tes

Kevin Carter, por Rubén Pinella.
http://elsenialador.blogspot.com/2006/04/kevin-carter.html

24 de octubre de 2008

El Poncho y el Pájaro y sus columnas y otros columnistas

De Poncho Rentería no se nada más allá de sus columnas que publica semanalmente diario EL TIEMPO de Colombia (y tratando de buscar algo de él en el dios del internet: Google, me entero que también tiene un espacio de opinión en diario EL PAIS de Cali), y es por esa razón que me animo a escribir algo de él.

En vista de que cada vez que trato de redactar algunas líneas sobre la vida de alguien, siempre termino en copiar sus acciones más relevantes (con fuentes incluidas), por la fatalidad de no conocerlo y mi genética de admirar a prácticamente nadie, a lo mucho un profundo respeto para quien lo vale, el Poncho es la ocasión perfecta para inventar a alguien que existe.

El Poncho, para mí, es el arquetipo de izquierdista colombiano, intelectual de café o de aguardientico (eso por ahora no importa), un burgués bonachón al estilo de Alfonso Reece pero sin fanatismo e inclinado al otro lado de la balanza (left please). De estúpidos, sin sentido, chismosos y otros, son los comentarios que he leído de sus escritos; claro que otros lo apoyan pero en Colombia, en mi opinión, un país derechizado gracias a las (des) gracias provocadas por las FARC (y demás guerrillas), narcos y paras, y con un Álvaro Uribe como ángel de la guardia y pastor de los aterrados (indígenas marchan en Colombia, y ya por eso se habla de ellos como subversivos), pareciera que el Poncho no tiene espacio en el país del tintico.

Saliéndome un poco de lo que creo del Poncho: Al diario EL TIEMPO (en Cuenca también hay uno pero no es el mismo) lo comencé a leer desde el incidente de mi tocayo (para mi mala suerte) Reyes y la supuesta foto con el ministro Larrea. Me interesé en sus columnistas y todos ellos hablaban del eterno conflicto con las FARC, así le dedique un mes a pleno y sentí que en el vecino país del norte no existía pobreza, ni corrupción, ni delincuencia, solo guerrilla (es algo que me dejó perplejo: no solo que el conflicto armado provoca sus víctimas, sino que pone a un lado las soluciones para el resto de problemas colombianos). Pero la verdad es que después del periodo de intensa y serena lectura (porque la lectura serena, quiérase o no y hágase como se haga), al único que seguí fue al Poncho, porque además de arquetipo izquierdista y el resto de adjetivos de arriba, me recuerda a los colombianos tal los conozco: vivarachos, berracos y con una AK – 47 en lugar de lengua (lejos de la xenófoba descripción que me dan algunos amigos y paisanos guayacos). Además del sincero respeto, por la osadía del Poncho, claro está, de escribir sobre sus visitas a peluquerías, gimnasios y otros sitios de reunión frecuentes para el chisme, inventándose personajes que hablan del diario vivir colombiano (inclúyase aquí política, economía y demás).

En Ecuador en ese aspecto tenemos al Pájaro Febres – Cordero, quiteño nacido en 1950 y columnista de diario EL UNIVERSO; todos los domingos, con su cantadito quiteño y sin guardar mayor respeto a lo que algunos denominan el buen escribir (buen vivir, buen morir, buen dormir, etc.), escribe con humor y mordacidad sobre los eventos y personajes más importantes, transformando la realidad que nos inventan en la verdad que es, quitándole las caretas bajo las que se esconden sus actores (ah por cierto, la palabra persona tiene su etimología en la palabra máscara). Al principio, cuando un día decidí que debía comenzar a ojear los periódicos y ver que la realidad es algo más que un partido de fútbol o el contorneo de unas caderas femeninas, me pareció bastante raro que alguien con el apellido Febres – Cordero hablará de derechos humanos y se burlará de Gobiernos pasados (Santiago Roldós también se burla y critica sin ninguna misericordia a su familiar el loco), pero sin discriminación, lo leo domingo a domingo (su frase: los peores gobernantes son los que más nos alimentan de humor).

La verdad es que escribo esto, porque también me estoy cansando un poco del escribir técnico (con estadísticas y fuentes incluidas), por ahora intentaré destruir mi escritura, como Cortázar, para hallar mi estilo, y si sigo con la opinión corta, aunque la transición va a ser dura y lenta, del estilo del Poncho y del Pájaro (donde por fin el producto nacional es mejor que el extranjero) me apoyaré por el momento, además de que también me es bastante cansada la lectura de opinión de los diarios que normalmente he seguido. Recuerdo hace dos años, creo, cuando en el UNIVERSO leía a Aminta Buenaño, Javier Ponce, Pablo Lucio Paredes, y ahora (acepto que los reemplazos son necesarios) no tienen mayor letra que valga la pena. Escribe Joffre Campaña que es un asesor de Nebot (entonces porque también el diario guayaquileño no le da una columna a Vinicio Alvarado), y ahora me entero que se fue Xavier Flores y continúan los peleles y curuchupas de Pedro Valverde y Bolivar Castillo, respectivamente. Así que comienza una nueva búsqueda para no callar y vencer el miedo, que es lo que dice la imagen de ecuarrisa, que también tiene opinión, pero en EL COMERCIO.

Aquí, finalmente, escribo mis preferencias de lecturas cortas (la literatura dejémosla para otro rato), esperando opiniones, aportaciones, difamaciones y etc. Igual estamos juzgando la escritura de otros.

De Diario EL UNIVERSO:

- Lunes: Manuel Chiriboga y Simón Pachano.
- Miércoles: Nelsa Curbelo (profesora mía de Cátedra de la Paz).
- Sábado: Alfonso Oramas Gross.
- Domingo: El Pájaro Febres – Cordero y Walter Spurrier.

- Y lo mejor del UNIVERSO: El maestro Bonil y lo que nos viene de Paul Krugman, Thomas Friedman, Nicholas Kristof, Bob Herbert y Gonzalo Peltzer.

De Diario EL COMERCIO:

Sé que escriben César Montúfar y Francisco Carrión. A esos les recomiendo, y si quieren debatirse un rato a ustedes mismos, Carlos Alberto Montaner (aunque no lo tomen muy en serio).

De Diario EL TELÉGRAFO:

De los columnistas, la verdad que nada y peor aún, aunque desconozco las razones, cuando dejaron de publicar los escritos de Santiago Roldós. Pero el espacio de Firma Ancla es una delicia (manjares que por primera vez llegan al Ecuador), recomiendo: A Juan Cocco, Maruja Torres, Tina Zeraga y Javier Cercas.

De Diario EL TIEMPO de Colombia:

Valen la pena leer: Daniel Samper, Poncho Rentería y Sergio Muñoz Bata (por casualidad todos escriben los miércoles).

De Diario EL PAIS de España:

Léanse todas las opiniones y descubran sus preferidos, la verdad es que yo todavía no los tengo.

De Revista Vistazo:

Santiago Roldós y Patricia Estupiñán.
De Revista Interviu:
Lean semanalmente a Joaquin Sabina y Juan José Millas.

Y de blogs algo:

- El Pub De Cuenca (de estilo del Poncho y del Pájaro).
- Cultura B (hablamos como panas de rock, cine y libros).
- El de Xavier Flores Aguirre (mezcla de cultura y política).
- Investigaciones IO (desarrollo humano, lucha contra la pobreza, cambio climático, etc.).
- Post secrets (el blog más leído del mundo, donde artística y anonimamente la gente revela sus secretos).
- Pongamos que hablo de Christine (la polémica vuelta mujer (polémica es femenino (oh! tres paréntesis (no mejor cuatro, que por fin estoy destruyendo mi escritura y las 42 líneas fijas y mejor pateemos el tablero(Grande Maitena, ¡como amo a las feministas!, con tu frase, oops! cinco paréntesis)))), con unos comentarios de otros bloggeros, que por mala o buena suerte, la verdad es que áun no decido, no conozco, tal vez algunos con sus palabras e ideas también los he de inventar y los he de incluir como personajes extras de algún libro que algún día, si lo rutina me lo permite, he de empezar) ¿Por qué la bendita y maldita polémica se lleva más líneas que el resto? Empecemos a aplicar un poco de justicia social también en la literatura.

A estas nimias recomendaciones o páginas amarillas podemos, seguir ampliando la lista.

24 de septiembre de 2008

Estoy ciego, estoy ciego

Uno abre su correo y se encuentra con algo así: Estaba una universitaria hablando con su padre sobre lo aprendido en sus estudios, contaba sobre sus lecturas de Marx y el materialismo dialectico, la lucha de clases, la distribución igualitaria y otras teorías que encontró en EL CAPITAL, dándole total razón al pensador alemán y pidiéndole una explicación al padre del actual sistema económico mundial y todos los perjuicios que ha traído la derecha. El papá pasivo y sereno le pregunta a su retoño de cómo va su mejor amiga. Ella le contesta que muy mal porque tiene descuidados sus estudios y no le da mayor interés. Acto seguido el progenitor le pregunta al fruto de sus entrañas de por qué no le da algunos puntos de sus excelentes calificaciones a su compañera. La respuesta que se espera es de lo más lógica: Ella no se lo merece, esto es resultado de mis esfuerzos, y él lo único que responde es: Hija, bienvenida a la derecha.

Esta hueca historia del conocido estilo simplista de La culpa es de la vaca o Quién se ha llevado mi queso, no provocaría ningún daño si no pasara de anécdota, lastimosamente estos dos textos son best sellers y de lectura obligatoria para todos los estudiantes de negocios, y al estar yo presente en esas clases, confieso que se nos imponían como verdades absolutas (suerte que en casa me enseñaron que los libros te deben provocar mayor curiosidad que respuestas) y lo corroboro con algunos comentarios de mis compañeros: Ja! Buen ejemplo; más atinado no podría ser; digno de usarlo de ejemplo con nuestros hijos. Si fuera así, tan simple para que alguien acepte determinada ideología, como la hija estudiante con Marx, o como mis amigos con su historia, yo les podría decir que lean Ensayo sobre la ceguera de Saramago, que trata de cómo en un país todos sus habitantes se quedan ciegos y son capaces de cualquier cosa para sobrevivir. Una parábola que crítica al individualismo capitalista donde prima la competencia, y de paso el libro muestra al comunismo como mejor opción. Añadiendo también que esta historia no fue escrita por cualquiera, sino por un Premio Nóbel de Literatura.


Claro que otro día también podría comentarles que Saramago apoyaba el régimen cubano, hasta que un día se enteró de cómo Fidel mandó a fusilar y encarcelar a varios traidores de la revolución (algunos periodistas), y las palabras que se escucharon del escritor portugués fueron: Hasta aquí he llegado. Y claro que cuando crezca, y deba mantener a una familia, es probable que me despoje de algunos pensamientos izquierdistas que ahora tengo, podría decir como uno de los personajes de Benedetti: Se sigue fiel a los principios o se gana plata.

El mismo Marx ya señalaba que encuentra mayor explicación de los sucesos de la economía en los cuentos de Charles Dickens que en la teoría económica. Y es fácil observar que hay algo de verdad en eso. Para muestra, como ejemplo, tengo el prologo del Fausto de Goethe cuando discutían el director, el poeta dramático y el gracioso, notando en el primero claramente una ideología capitalista; en el segundo socialista; y el tercero, digamos una tercera vía. En la literatura, mi reparo con los simpatizantes de derecha en Ecuador, respecto a su vocación por las historias cortas y sencillas, es que las usan como principal argumento de exposición de ideas y adoctrinamiento. Ya decía la directora del Instituto Ecuatoriano de Economía Política (IEEP), en un editorial hace un par de años, de que el principal problema de la derecha es su falta de buenos escritores. Y el problema de la izquierda ecuatoriana es que con sus actuaciones, en nombre de personajes del pasado, provocará que pronto utilizar los términos Alfarismo y Bolivariano, sea lo mas parecido a invocar al cuco.

Fuentes:
Ensayo sobre la ceguera, de José Saramago.
Gracias por el fuego, de Mario Benedetti.
Fausto, de J.W. Goethe.
Las historia de EL CAPITAL de Karl Marx, por Francis Wheen.
http://www.ieep.org.ec/

17 de septiembre de 2008

Un hombre corriente

“Imagínese una jaula llena de ratones rodeada de gatos, gatos que entran y salen de la jaula”, dice Paul Rusesabagina “imagínese eso y quizá podrá a empezar a tener una idea de lo que vivimos los que nos refugiamos dentro del hotel durante el genocidio”. Pero: ¿Quién es Paul Rusesabagina? Un hombre corriente, como él mismo se describe en su libro. Les explico un poco el contexto.

En Ruanda, por siglos, convivieron de manera simbiótica varias tribus provenientes de otras regiones, entre estas se hallaban los hutus y los tutsis, hasta que los jefes militares de estos últimos, iniciaron campañas militares contra los hutus, asesinando a sus príncipes y humillando a sus contrincantes, recordándoles que los tutsis eran sus amos. Así empezó una relación de vasallaje, aunque los dominadores eran la minoría y las relaciones socioeconómicas no estaban totalmente definidas. Pero la colonización europea, sea tarde o temprano, debía llegar en algún instante, Alemania y Bélgica, y ahora sí los distanciamientos entre ambas etnias se acrecentaron, llegando a utilizar incluso un documento de identidad para distinguirlos. En 1958, por las tensiones entre tribus, se produjo una revuelta de hutus pidiendo la salida de la monarquía tutsi, siendo de ahí en más, Ruanda, una supuesta república democrática, aunque con un periodo de dictadura en la década de los ochentas (350 mil hutus asesinados).

Ya en 1994, Ruanda, con un Gobierno hutu, es el escenario del peor genocidio después de la segunda guerra mundial. El presidente ruandés, acompañado con su homologo de Burundi, es asesinado cuando tutsis radicales derriban su avión. Este evento sumado a las presiones por el desplome de la economía nacional, las bajas en el precio del café y la rivalidad existente, provocó lo que algunos ya señalaban inevitable. En cien días 500 mil personas fueron asesinadas, 50 mil por día, cuatro cada minuto, casi todas tutsis, aunque también los hutus que quisieron salvar a sus amigos con diferente carnet, corrieron igual suerte. Mientras tanto, las fuerzas militares de EUA y la ONU se retiraron del país, y Al Gore inauguraba el museo del genocidio judío repitiendo varias veces ese hipócrita “nunca jamás”. El machete fue el instrumento predilecto de las bandas rebeldes, lo que volvía al suicidio o al pago por ser asesinado de un tiro, la mejor opción.

Aquí aparece Paul. Hutu con esposa tutsi, padre y Gerente de un prestigioso hotel belga, el Mille Collines (no es un puesto para cualquier ruandés). Pero: ¿Qué vuelve diferente a este hombre corriente? Durante la peor parte del genocidio, Paul fue capaz de salvar (o ayudar según propias palabras) a 1268 personas. En un principio solo le interesaba la supervivencia de su familia. Sin embargo a medida que se acrecentaban las matanzas, el hotel donde trabajaba sirvió de refugio para ruandeses de ambas etnias. Utilizó sus influencias, medios corruptos para hombres corruptos (alcohol y dinero para sobornar), y una línea telefónica, para que no ocurriera una masacre dentro del Mille Collines. ¿Pero por qué los militares no incumplían su palabra y asesinaban a todos los presentes? Después de todo, la mentira no era el mayor pecado cometido. En entrevista para diario EL PAIS de España, Paul decía que la clave consistía en detenerse a negociar y tratar a estos generales o comandantes con respeto y con honor, como si fueran personajes importantes, porque eso les importaba más que el dinero. Ahora el antes gerente vive en Bélgica y trabaja como taxista, debido un intento de asesinato mientras apoya la reconstrucción de Ruanda

Escribo sobre esto, aunque a muchos no les interese, porque estas barbaridades que para la mayoría no existen (en Ecuador gracias a los medios de comunicación), se siguen repitiendo en Darfur y el Congo; y también para recordar que existe un mundo más allá de nuestros ojos, incluso en Ecuador, que sin ser África, también tiene gente vegetariana a la fuerza porque el dinero no alcanza (el hambre después de la guerra, el peor asesino). Este vegetarianismo, que es el menor mal, sucede aquí y ahora, con regeneración urbana y con revolución ciudadana.

Fuentes:
Un hombre corriente, por Paul Rusesabagina.
Película: Hotel Ruanda, dirigida por Terry George.
El hutu salvador, por diario EL PAIS de España.
http://www.elpais.com/articulo/portada/hutu/salvador/elpepusoceps/20050227elpepspor_2/Tes
Paul Rusesabagina: Las palabras pueden salvar y pueden matar, para EL PERIODICO.
http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=396704&idseccio_PK=1006
Hotel Ruanda: Sobre héroes y premios, por BBC mundo.
http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/specials/newsid_4267000/4267399.stm
El genocidio de Ruanda, por Jesús Sordo medina para el proyecto HOMO HOMINI SACRA RES.
http://www.homohominisacrares.net/sec/historia/rwanda/ruanda1.htm

6 de septiembre de 2008

Mis días sin ella

Nadie sabe lo que tiene hasta el día que lo pierde dice un viejo refrán y una canción de telenovela colombiana. Así en estos viajes, algo que extraño, además de la cocina de casa, y la compañía de familiares y amigos, es el sentarme a leer todos los días el diario, periódico, prensa escrita o como quieran llamarle, junto a un café y algo de esa música natural y citadina innata en Guayaquil. El de la casa, el que compra mi viejo y después guarda, o se utiliza para limpiar manchas de piso y los excrementos de los perros, tiene nombre y apellido: Diario EL UNIVERSO.

Es que personalmente, pienso que el diario debe ser una ventana al mundo, el Ecuador resumido en tinta china, y en esto, a pesar de las criticas de familiares y amigos que viven en otras ciudades, de que EL UNIVERSO es un diario parcializado o extremadamente guayaquileño, creo que dentro de sus errores y omisiones es el más completo. Claro que podemos señalar su nimia promoción de la cultura; las pocas investigaciones que realiza; las escasas páginas de información internacional; su falta de autocrítica; la atestada publicidad; y sus exiguos y nulos espacios de opinión. Pero en materia política y en editoriales (a excepción de Pedro Valverde y Bolívar Castillo, personajes que no entiendo como puede permitírseles escribir y propagar sus ideas en un medio masivo) es por el cual me inclino a leer e informarme. Sí, de esas mismas noticias de siempre, que a Clítoris Bailón (Clit Poirot); investigador privado, gourmet misógino, amante de la masturbación; personaje de la novela de Miguel Donoso Pareja, les parecían aburridas y triviales. Esas mismas noticias de un Ecuador jodido.

Pero esto de viajar, aparte de no poder leer en confort, tiene su ventaja en que te encuentras con todo tipo de prensa. Así un día sin previo aviso, llegó a mis manos diario EL TELÉGRAFO. Lo pude calificar de un informativo light o de ese Ecuador que todos soñamos, porque al ser afín al Gobierno, da la impresión de que sus directivos se olvidaron de los problemas del país. Sin embargo es un medio de comunicación, aunque parezca raro, donde me gustaría trabajar. Por su aire de urbano y rural a la vez, de considerar a la persona como lo que es y no como una estadística macroeconómica, y por ese recorte, del abimo cultural, que promueve. El espacio de Firma Ancla es una idea para recoger más ideas y las líneas que se trazan aquí merecen ser desmenuzadas, masticadas y digeridas.

La sección de Retratos es mi favorita, revelando que si es verdadero ese realismo mágico que únicamente creíamos encontrar en los libros de García Márquez, mostrando de forma sutil, como un bizarro momento de farándula, el trabajo diario de gente común. Para muestra: Suena la canción: “Si siembro coca será porque me toca... Haber cultivado coca no le causa vergüenza. Sí, haberle fallado a su familia cuando “me las di de picaflor y tomatrago”. ¿Se necesita un mejor relato para entender a un refugiado colombiano, con aires de cantante? Con estas líneas, en mis recorridos, dan ganas de conversar con todo el mundo y enterarme de esas historias que aún no han sido contadas.

Pero por ahora me voy acostumbrado a EL MERCURIO de Cuenca… ¿Qué me deparará? La verdad es que un día sin la prensa y un café no es un buen día.

30 de agosto de 2008

El tuerto es rey

En Tierra de ciegos, más que una película, parece una surrealista y bizarra obra de teatro, llena de metáforas y exageradas actuaciones. Con Joe (Ralph Fiennes), como un guardián de prisión encargado de los alimentos del más importante prisionero político de un régimen totalitario desconocido (todos los actores tienen acento Beatle). El prisionero en cuestión se llama Thorne (Donald Sutherland), escritor encarcelado por haber presentado una obra de teatro, que era una clara critica al emperador Maximiliano II o Júnior. Un psicópata director de cine, amante de la violencia y la represión para mantener su egolatría y al país a sus pies.

Joe es un tipo que ama de manera ferviente a su patria, pero al escuchar las ideas de Thorne durante 13 años, piensa que las cosas en el país no funcionan correctamente. Estos pensamientos de Thorne, también han calado dentro de la sociedad, generando el movimiento “Ciudadanos por la justicia y la democracia”, opositor al gobierno. La presión es tanta hacia Júnior, que sus asesores le recomiendan liberar al prisionero político, para que este presida el parlamento, y así dar la impresión, a los habitantes, de que viven en una democracia. Pero Thorne no es tonto, y una vez libre rechaza el puesto y se convierte en el cabecilla de una revolución. Después de un tiempo dentro de la película, se lo puede ver a Joe ahora como guardia del emperador, casado y con una hija pronta a nacer; sintiendo que ese no es el mundo que desea para su familia, se decide por apoyar a la revolución, colaborando en el asesinato de Júnior por parte de Thorne (previo a un sátiro y bufonesco juicio, junto al homicidio de la primera dama).

El nuevo gobierno, encabezado por el antes prisionero político, resulta aún más opresor que el anterior, coartando todas las libertades a la población (medio talibán, medio Corea del Norte, medio Cuba, medio Birmania, y próximamente ¿medio Ecuador?), y con la finalidad de implantar la nueva ideología, los opositores son enviados a campos de re – educación, para poder insertarlos, en un futuro, al nuevo sistema. ¿Y el destino de Joe? Fue declarado un héroe nacional, pero al ver los actos del nuevo régimen, se rehusó a firmar una carta de lealtad, motivo suficiente para enviarlo a un campo de reclusión, donde paso los siguientes veinte años. En este lapso, Thorne es asesinado y un antiguo pariente de Júnior sube al trono, siendo el futuro de Joe nada agradable, al saber todos sobre su colaboración con la revolución.

En el transcurso de la película, se muestra la parábola de seis ciegos que se encuentran con un elefante, sin saber estos lo que era, creyendo cada uno algo diferente. Uno pensaba que era un árbol, otro una serpiente, etc. (mejor retrato, pero para un diferente tema, leer a Alfonso Reece). Esta parábola describe a la película, y lo que nos pasa a la mayoría de personas que creimos en revoluciones, lideradas por individuos que al final solo desean estar en el trono. La sociedad es la ciega y los salvadores revolucionarios, ese gran elefante que no sabemos lo que es, ni lo que hace, pero al cual nos aferramos, para liberarnos del anterior mal.

Casi nunca he estado de acuerdo con los escritos de Gabriela Calderón para el diario EL UNIVERSO, pero no tengo más que darle la razón y compartir el pensamiento, en su articulo “Utopía y violencia”, de que para librarnos de la corrupción, la pobreza y todos los males anteriores, no necesitamos ceder nuestros derechos o libertades, ni dar paso a la violencia. Es que con los actos del gobierno de Rafael Correa y la Asamblea Constituyente, muchos no volveremos a creer en la palabra revolución.

Fuentes:
En tierra de ciegos, por el blog EL BUEN CINE.
http://elbuencine.blogspot.com/2006/08/tierra-de-ciegos.html
Utopía y violencia, por Gabriela Calderón.
http://www.eluniverso.com/2008/08/20/0001/21/2498DCF462E342C991D1D6D6D4D3F902.html
Los seis ciegos por Alfonso Reece.

16 de agosto de 2008

Remember Sammy Jankins

El éxito de la última película de Batman: The dark knight, más allá de la actuación de Heath Ledger (+) como The joker, los efectos especiales y las secuencias de acción, se debe al excelente y entramado guión que elaboró (y dirigió) Christopher Nolan, junto a su hermano Jonathan. Batman, después de Tim Burton, no pudo haber caído en mejores manos, si vemos por un segundo la filmografía Nolan y encontramos películas de la talla de Memento y The prestige.

Vale la pena recordar a Memento. Esta obra maestra se nos muestra de atrás hacia adelante, en una historia que presenta primero las consecuencias y después las causas. Entre cada escena o salto, hay otras en blanco y negro, que se desarrollan normalmente y forman parte del final. A Memento más o menos se la puede explicar así: Leonard es el personaje principal (Guy Pearce, L.A. Confidential), el cual sufre de amnesia anterógrada después de presenciar como su esposa era violada y asesinada, mientras él recibe un golpe en la cabeza. Su condición no le permite almacenar cualquier suceso después del accidente, y para cumplir su deseo de vengar a su difunta amada, crea un sistema para recordar su vida, mediante fotos instantáneas que le sirven para saber donde se hospeda, la gente que conoce y sus enemigos. Además se tatúa cada una de las pistas encontradas, que lo pueden llevar a cumplir con su objetivo.

En las escenas en blanco y negro, intercaladas entre las de colores, que representan el principio de la historia, pero son el final de la película (¡qué lío!), se cuenta el relato de Sammy Jankins: Leonard (antes de su accidente) fue un agente de seguros y Sammy Jankins su caso enigmático. Este último no poseía memoria a corto plazo y Leonard debía comprobar si fingía o no. El diagnóstico fue que la enfermedad era meramente psicológica y por lo tanto, el sujeto no era apto para recibir el seguro. La esposa de Sammy desesperada porque creía que su marido mentía sobre su condición, hizo que este le pusiera varias veces una inyección con insulina (para ver si recordaba). El resultado fue la muerte de la Sra. Jankins.

Leonard (después del accidente), cada vez que pierde la memoria, ve en su muñeca un tatuaje que dice: Remember Sammy Jankins (Recuerda a Sammy Jankins), lo que le permite acordarse de su condición. Algo parecido deberíamos hacer los ecuatorianos, para tener presente por lo que hemos pasado antes de tomar una decisión. Tatuarnos en la mano o pegar en la pared de la sala de nuestros hogares, todos esos acontecimientos cercanos y lejanos en materia política. Así podríamos recordar como hace 3 años, el actual y principal líder de la oposición, armó su propia Corte de Justicia; como algunos sacerdotes de la iglesia católica, ayudaron a escribir un libro sobre la inocencia de los hermanos Isaías; y como el actual Gobierno pretende hacer lo mismo que los pasados, diciéndonos que esta será la última vez que se elijan a dedo representantes públicos (ver las transitorias de la nueva Constitución).

Al final de Memento (el principio de la historia), Leonard descubre que la vida de Sammy Jankins era la suya en realidad, y que hace mucho tiempo ya había encontado al asesino de su esposa. A los ecuatorianos nos puede estar pasando lo mismo, repetiendo los mismos eventos una y otra vez. Cultivar esa suerte de memoria histórica (que hasta ahora se traduce en unos pocos libros y documentales) puede ser el tatuaje que necesitamos para no volver a equivocarnos.

26 de julio de 2008

Amiguillos

Resulta extraño ver como se toman o mantienen medidas (justificadas, a excepción de la última) contra Corea del Norte, Cuba o Irak; mientras a otras naciones, que violan los derechos humanos o amenazan la soberanía de terceros, se las elogia y premia, gracias a su condición de aliadas o estratégicas. Es la hipocresía de la política internacional de lo que pretendo escribir un poco. Poniendo como ejemplos a tres países, que abusan de su población civil, pero estos actos los desconocen (o pasan por alto) los EUA y la UE. El primero es un comprador de deuda norteamericana y proveedor de bienes a bajos precios (1), otro es un gran exportador de petróleo (2) y el tercero es un importante aliado geopolítico en un duro terreno como es el mundo árabe (3).

(1) China: Álvaro Vargas Llosa señala que el mundo ha pasado más tiempo festejando los logros de la economía china que recordando… la supresión de las libertades civiles y políticas de una quinta parte de los habitantes del planeta. Razonamiento justificado en que sus dictadores de mercados, aunque han ayudado a millones a salir de la pobreza extrema; aún mantienen la censura contra periodistas y la oposición; se evita militarmente toda clase de manifestaciones (como se vio en el Tíbet); y se persiste en el uso de métodos de enjuiciamiento incompatibles con el Pacto Internacional de derechos políticos y civiles. Además de los negocios de armas con Zimbawe, Darfur y Corea del Norte, o el apoyo brindado a la dictadura de su vecino Birmania.

(2) Arabia Saudita: Aquí, como lo dicho por Juan Torres López, manda una familia de dictadores… que goza del respeto y el favor de los más poderosos de la Tierra. Reyes con una fortuna mayor a los 600 mil millones de dólares, pero la renta nacional per cápita anual ha pasado de $ 35 mil a $ 7 mil en los últimos veinte años. Además de que solo el 47% de la población está alfabetizada, el IDH es semejante al de El Salvador y no hay derechos democráticos ni se respetan las libertades políticas básicas. Quienes critican al Estado están expuestos a que se los detenga por tiempo indefinido sin cargos ni juicio, las apedreadas por adulterio y decapitaciones son habituales. Sin olvidar las presuntas conexiones de este país con terroristas.

(3) Israel: El pasado lunes 16 de junio, la Unión Europea debatió y aprobó lo que se conoce como “upgrading” (reconocimiento o avance) en las relaciones entre la Unión Europea e Israel. Se premia a este país, con preferencias arancelarias, a pesar de las continuas condenas en el marco de las Naciones Unidas o la Corte Internacional de Justicia respecto a la ocupación militar de Palestina y la construcción del Muro (la cárcel más grande del mundo), sin dejar de mencionar la creación de colonias en territorio palestino, con el objeto de apoderarse también de estos terrenos; la judaización de Jerusalén y una limpieza étnica que ha dejado más de 800 mil palestinos muertos desde el año 1948, gracias a la ayuda provista por naciones occidentales.

Así es como la opinión de los EUA y la UE, es la única válida para designar quienes son los buenos y quiénes son los malos, y a donde se dirige la cooperación internacional, sin importar como dijo Elsie Welsier (respecto a Israel), que algunos países utilicen el poder militar o violen derechos humanos, por su condición de víctimas (y de amiguillos de los poderosos).

Fuentes:
Derechos humanos en China y las Olimpiadas de Pekín, por Amnistía Internacional.
http://www.amnesty.org/es/china-olympics
Olímpica tiranía, por Alfonso Reece.
http://www.eluniverso.com/2008/05/26/0001/21/D5DC9485C41B47F192A546290E9A817A.html
La otra China, por Álvaro Vargas Llosa.
http://www.vistazo.com/webpages/edicionanterior.php?edicion=977&sID=3&ID=1835
Hugo Chávez no veranea en Marbella, por Juan Torres López.
http://www.juantorreslopez.com/
Reino de Arabia Saudí, por Amnistía Internacional.
http://www.amnesty.org/es/region/middle-east-and-north-africa/west-gulf/arabia-saud%C3%AD
La Unión Europea premia a Israel, por Alberto Arce.
http://www.revistapueblos.org/spip.php?article903
15 de mayo de 2008: 60 años de la Nakba, por Mireia Gallardo.
http://www.revistapueblos.org/spip.php?article893
Los pensamientos son libres, la entrada no, por Joharan Baker.
http://www.revistapueblos.org/spip.php?article895

12 de julio de 2008

Los Indiana Jones de la cooperación internacional

Además de 1984, de George Orwell, existen otros libros que hacen referencia del Reino Unido como un estado totalitario, donde se coartan las libertades para mantener el control dentro de una sociedad. Distopías es el género para designar a estas obras, en un entorno futurista, en guerra (solo Inglaterra no sucumbe al caos), xenófobo y con rasgos de fascismo y nazismo.

Mundo aunque lejano a la realidad, no imposible, con Irán probando nuevos misiles, Israel continua su campaña contra los palestinos y como en la película Children of men, los migrantes ilegales son encarcelados en la Unión Europea, mientras Estados Unidos construye un muro.

El hecho de que la mayoría de estos textos “apocalípticos” fueron escritos entre los años 40 y 80 (al cine desde los 70), manifiesta que la inspiración para los autores vino de haber presenciado una guerra mundial y la guerra fría. Y lo que ahora podemos encontrar en librerías o el cine, fue la forma como imaginan el futuro.


En Hollywood actualmente hay una corriente parecida. Durante la última década se han llevado a los cines éxitos basados en distopías actuales, presentando el lado oscuro de la realidad. Hotel Ruanda, Diamantes de sangre o El jardinero fiel son ejemplos del nuevo tipo de películas que trata de concienciar al mundo occidental de la pobreza, guerras y cualquier causa de terror para los países pobres, causas que en ocasiones se dieron por la influencia de naciones occidentales.

Los guiones muestran situaciones particulares dentro de un entorno lleno de de sangre y miseria (a diferencia de los documentales de History Channel). Así que para asegurar la taquilla, podemos ver a Leonardo Di Caprio como un mercenario que desea irse de Sierra Leona vendiendo un gran diamante; o a Ralph Fiennes buscando razones del asesinato de su esposa, mientras se encuentra con una conspiración de farmacéuticas en Kenia. Y a pesar de que en la gran pantalla no se resalta la cultura de los países y se presenta al hombre blanco como el salvador arrepentido de sus actos; estas películas pueden servir para formar una conciencia de masas y de fuente de información para que la gente sepa de donde proviene lo que está comprado, o el precio que están pagando otras personas para que el consumidor pueda obtener bienes a precios módicos.

Por ahora tocará aprender la realidad mundial según lo que me digan estos Indiana Jones de la ayuda internacional. Peor aún, si los diarios ecuatorianos le dedican un pequeño cuadro a noticias tan importantes como las amenazas a la oposición por parte del dictador de Zimbawe, Robert Mugabe; o el asesinato de embajadores de las Naciones Unidas en Darfur (sin siquiera mencionar el genocidio en este país).

Así que, nos toca esperar lo nuevo de Di Caprio o Angelina Jolie para aprender algo.

Esquirlas finales sobre los medios de comunicación: En un principio estaba de acuerdo con la creación de un medio de comunicación público, mientras este sea independiente (para tener diversas fuentes de información). Pero con las declaraciones de Ricardo Patiño, parece que ahora la concentración de medios pasa de los grupos financieros hacia el Estado. / Comentarios como los de Manuel Gómez Lecaro en su último editorial respecto a diario EL TELÉGRAFO, dan a pensar como algunas personas ven a la cultura y a la información solo como un negocio de publicidad.

Fuentes:
Indiana Jones al Servicio de ACNUR, por Juan Carlos Ampié.
http://www.revistapueblos.org/spip.php?article545&var_recherche=Indiana%20Jones
El Gobierno de Zimbawe aumenta las agresiones a líderes del partido de oposición.
http://www.elpais.com/articulo/internacional/Gobierno/Zimbawe/aumenta/agresiones/lideres/partido/oposicion/elpepuint/20070319elpepuint_6/Tes

7 de junio de 2008

Morelliana

Concluí de leer “Rayuela” de Julio Cortázar hace siete meses y en todo ese tiempo hasta ahora, tengo muchos pensamientos respecto a lo que se relata en el libro: Imagino aún a la maga en sus andanzas por París mientras observaba mendigos enamorados, a Oliveira y el por qué de escribir su nombre Holiveira, al club de La Serpiente escuchando jazz mientras los vecinos se quejaban, a Talita y Traveler, y otros más. Mi personaje favorito es Morelli y sus Morellianas, el cual me dio una de las principales razones por las que ahora escribo, de una manera informal y casi anónima que disfruto.

En uno de los capítulos que no son de lectura obligatoria y rompen todo orden tradicional de contar una historia, Morelli señala el encanto de poner en escrito las cosas en bruto, ya sea reflejado en un dibujo que solo el que está al tanto de la historia puede entender; o poniendo las palabras a secas, sin utilizar adjetivos para adornarlas.

La mayoría de los que estén leyendo lo escrito en estas líneas, no comprenderán el por qué este pasaje de uno de los capítulos dedicados a Morelli, es una de mis razones para escribir, pero repitiendo lo señalado en el párrafo anterior: Solo el que está al tanto de la historia lo puede entender, entonces ese sería solo yo. Igualmente alguna fuerza me lleva a explicarlo.

El genial Bonil dentro de su blog personal (ver más abajo las fuentes), nos presenta un cortometraje proyectado en el Festival de Cine de Cannes 2007. El video es una animación del cuento de José Saramango (Premio Nobel de Literatura) “La flor más grande del mundo”. Aquí las imágenes hablan por sí solas y no son necesarias las palabras, a excepción del principio y el final donde Saramango nos relata su dificultad en escribir cuentos para niños.

Cuentos para niños que se le hacen muy difíciles de escribir a él, porque debe hacerlo con palabras muy sencillas, porque además de elegir las palabras debe tener la habilidad para explicar la historia de una manera muy clara y tener la paciencia para saber contarla.


Esa es la razón de mi pasión por leer primero y después por tratar de escribir, porque puedo utilizar palabras duras, expresando los hechos por sí solos, o puedo relatarlos, adornando las historias, tratando de provocar sentimientos; y al final siempre estaría contando lo mismo. Escribo porque en el plasmar las palabras está la libertad maximizada y estoy yo, resumido en un montón de letras que tratan de formar ideas y decir lo que pienso y creo.

Escribo sin saber escribir, sin tener una estructura predestinada, de la misma razón que lo hacía aquel viejo enamorado en el libro de García Márquez “Memoria de mis putas tristes”. El escribía simplemente basado en el sentimiento de poder decir todo lo que había leído.

Hoy escribí esto para sentirme libre, tal vez mañana siga hablando de medio ambiente o desarrollo humano que tanto me gusta.

Dejo dos reflexiones como esquirlas, una relacionada con la lectura y otra con el escribir: En la primera cito a Saramango que nos dice ¿qué pasaría si las historias para niños fueran de lectura obligatoria para adultos? ¿Seríamos capaces de aprender lo que tanto tiempo venimos enseñando? Por eso me gusta tanto leer, porque siento que me renuevo cada día y no existe lo finito; y en cuanto a la escritura, no sigo una estructura aprendida en clases, porque como dijo Cortázar “es muy fácil advertir que cada vez escribo menos bien, y esa es precisamente mi manera de buscar un estilo”. Acabo de caer en cuenta que citando a tantos autores busco mi estilo.

Fuentes:
Rayuela, escrito por Julio Cortázar.
La flor más grande del mundo, de José Saramango, publicado en el blog de Bonil.
http://bonilperiodismo.blogspot.com/2008/04/la-flor-ms-grande-del-mundo.html
Julio Cortázar, un narrador para lectores cómplices, escrito por Mario Benedetti.
http://www.literatura.us/cortazar/index.html

24 de mayo de 2008

Mete gol gana

El año pasado en el Maac cine, durante la presentación anual de los Encuentros de otro cine (EDOC), cuando realmente valía la pena ir a este establecimiento por su programación y administración, se presento un documental del director ecuatoriano Felipe Terán, que reflejaba la situación de los niños del Chota y las esperanzas y sueños de la mayoría de estos, que consistían en volverse futbolistas, único modo de escapar de la marginación y carencias. “Que lindo puente el de Juncal… pasan los carros para Tulcán” nos dice una canción de la zona y como señala Daniel Avilés, este puente es lindo porque solo es de pasada y no nos detenemos a ver cómo vive la gente del lugar.

Lorena Giachino Torrens está presente este año en los EDOC, con su obra “Reinalda Carmen, mi mamá y yo”. Ella nos enseña con su película sobre la dictadura chilena, a tratar de mantener esa memoria colectiva que lleve a una nación hacia delante, recordando por donde todo el país ya ha caminado,.

Para algunos esa memoria colectiva, esa forma de vernos como nación y como otros nos ven se puede plasmar en el cine, en imágenes que como otro autor señalaba “es el álbum de fotos de nuestra historia”. Entonces ¿es necesario que se propaguen este tipo de actividades culturales, alentando a directores para que sigan innovando e incitando al público para que se entere de nuestra realidad tan cercana? Si Tania Hermida (directora de cine y asambleísta) se esfuerza por presentar imágenes dentro de la Asamblea, para dedicar espacios al debate y análisis de hechos anteriores (el recorrido del primer barril de petróleo), o de sucesos en otras partes del mundo (documental estadounidense acerca del fanatismo religioso en algunas escuelas). También sería importante y rescatable que se eduque y recuerde a toda la ciudadanía mediante las casas de la cultura u otros organismos estatales o independientes, el por qué estamos como estamos.


Tranquilos escritores, ya sé que ustedes también documentan y relatan a un país, el cómo vivimos, hacia donde vamos o aparentamos ir y los anhelos de algunos; pero es de importancia recordar que se están discutiendo en Montecristi los textos relacionados a la comunicación, y sinceramente es preocupante los impedimentos y el tipo de regulaciones que quiere dársele, donde el Estado a cualquiera, puede prohibir o acusar de provocar el caos en los ciudadanos por proyectar imágenes de sucesos que nos pasan a nosotros (a todos los seres humanos). Imagínense si por ser violento se prohibe mostrar en los noticiarios las actuales protestas xenofóbicas en Sudáfrica o las represiones a los activistas en favor de un Tíbet libre, imágenes que desde hace cuarenta años nos han permitido formar nuestra conciencia social, y que nos han alejado un poco de esa verdad tan absoluta que tienen los números, con los que un oficial de la marina nos quiso engañar diciéndonos que la producción petrolera ha aumentado.

Pareto (el mismo de la ley del 80 y 20) propuso alguna vez un anarquismo o forma de disminuir el peso del Estado, y el profesor Weiner perfeccionó la teoría, donde la comunicación es el cimiento de la sociedad y basado en ella todos podemos ser libres. Suena bastante bonito, lástima que la comunicación esté a expensas del mercado.

Fuentes:
Vivir y pensar como puercos, por Gilles Chatelet.

Zapatos, monedas e ilusiones, por Daniel Avilés.
http://www.cinememoria.org/edoc.php?c=447
Queremos dar vuelta a la página, entrevista a Lorena Giachino Torrens publicada en el diario EL UNIVERSO, el 18 de mayo del 2008. http://www.eluniverso.com/2008/05/18/0001/260/70C8406A8B7D4A76BC632F8241D18778.html

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